<$BlogRSDURL$>
vino con sandía       

Armando Zeblox
viernes, mayo 25, 2007
 
Clisé
"... y el sabio del pueblo dijo: Eso mismo era lo que yo queria que vosotros entendais,
tratad de volar juntos, mas nunca atados".

Sergio, no entiendo por qué todavía seguís ahí. Me parece que las cosas ya quedaron bastante claras como para que vos sigas insistiendo con esto. La cosa se puso brava, Sergio. Y cuando digo la cosa, me refiero a mí. Soy una cosa insostenible, no te das cuenta? Mejor escapate, sabés? Salí, no me enfurezcas. Por Dios mirate, tan sumiso.
Si te vas a suicidar, hacelo. Pero después no me vengas a decir que no te dije, ni me reproches nada. Si lo vas a hacer, ni una palabra Sergio, ni-una-palabra. Porque vos siempre andás sacando factura de lo que dije o lo que no dije, y yo digo lo que se me canta. Basta. Otra vez estoy hablando sola, y me aburro. Sí, dejate de hacer eso que estás haciendo y vení Sergio, haceme tuya. ¿Acaso no te gusto? ¿Y entonces? ¿No soy sensual? No,¿ no? Mejor no. Es una forma de decir. Yo hasta el matrimonio nada Sergio, ya te lo expliqué hace rato. ¿Cuántas veces, decime cuántas veces más vas a insistir con esto?
Estoy harta Sergio, mejor ni nos casemos, mirame, estoy como transpirada.